Juan Carlos Lucas, head coach, es el creador del proyecto Hacer Historia. Explicó las características que deben tener los líderes modernos y contó cuáles son los principales desafíos que enfrentan.

¿Cómo convertirse en un líder que oriente exitosamente a un grupo de trabajo? ¿Cómo lograr que la empresa sea competitiva económicamente pero al mismo tiempo innovadora y flexible? ¿Qué estrategias implementar? Estos son algunos de los desafíos que se plantea el Proyecto Hacer Historia, a cargo del académico y pionero en Management 2.0 en el país, Juan Carlos Lucas. “El liderazgo no tiene que ver con un cargo sino con la disposición que adopte la persona, que requiere de un cambio cultural”, dijo el head coach del seminario.

¿De qué se trata el Proyecto Hacer Historia?

Se trata de un programa que se basa en tres pilares fundamentales. El primero consiste en desarrollar habilidades, porque liderar y crear valor no viene en los genes, sino que es una capacidad que se desarrolla. En segundo término, cultivar una comunidad. Hay habilidades que no se pueden obtener en soledad sino que aparecen cuando nos relacionamos con otros. Por último, trabajamos para que el líder considere a internet como herramienta fundamental para cualquier proyecto por sus prácticas colaborativas a nivel global. Creemos que necesitamos formar líderes con destrezas específicas, que los necesitamos incluso más allá de las empresas, los necesitamos como país y como región.

¿Qué características debe tener un líder en la actualidad?

El principal desafío de los líderes de hoy es la reinvención de su identidad. La identidad de hoy se vuelve obsoleta con mucha más frecuencia que hace 40 años. Esto se ve fuerte en los últimos 15 por el proceso de cambio tecnológico, que hace caducar toda innovación. Esto se ve, por ejemplo en las carreras universitarias: la mitad de las nuevas no existía hace una década en Estados Unidos. Las identidades profesionales se reinventan y esto requiere de habilidades diferentes de las que correspondían a entornos estables y estandarizados.

¿Pueden convivir dos líderes en una misma organización?

El líder no tiene que ver con el cargo sino con disposición de las personas, la toma responsabilidad y el protagonismo. Obviamente que quien tiene el cargo de gerente general en una empresa tiene un espacio mayor de liderazgo y responsabilidad, pero todos tenemos la opción de ser líderes en nuestra labor o no serlo. Para nosotros el liderazgo debe orientarse mucho en crear valor para los clientes y esto puede hacerse desde cualquier posición. Pero se trata de una destreza muy contracultural, porque toda nuestra formación se orienta más a atender pedidos de resolución de problemas que a articular ofertas. Fuimos educados para recibir problemas y no para crear oferta.

¿Cómo trabajan esto desde Hacer Historia?

Operamos con cuatro dominios: construir visión; crear ofertas seductoras y confiables para clientes; desarrollar capacidad de coordinarlas, ejecutar acciones y administrar compromisos; resiliencia para afrontar el cambio, la incertidumbre y los efectos negativos como oportunidad de transformación, algo clave para lidiar en un mundo muy cambiante. En el seminario de Rosario vamos a trabajar en la capacidad de construir visión. Ver hacia adónde apunta el líder, cómo construye su mirada respecto a lo que es posible emprender, desarrollaremos su capacidad de aprendizaje, construcción de confianza, conversación y escucha a clientes para crear valor.

¿Podría relatar un caso concreto en el que el desarrollo de estas habilidades dio pie a un buen negocio?

Un ejemplo es el de unos emprendedores tucumanos que querían crear una empresa tecnológica. Al hacer el seminario y analizar la visión descubrieron que hacía un año que estaban trabajando en una aplicación, pero que jamás había hablado con un sólo cliente de los que se suponía que iban a usarla. Es decir que diseñaban sin conocer el cliente, haciendo suposiciones. Se dieron cuenta que tenían que empezar de nuevo, conversando con ellos para escuchar sus preocupaciones, y en base a eso diseñar la oferta. Así crearon una aplicación para móviles orientada al turismo de su ciudad, fueron finalistas de un importante concurso y después ganaron el Open App de Telefónica. Ahora quieren replicar la experiencia en otros lugares.

¿Es decir que este entrenamiento también sirve para la vida privada?

Por supuesto, porque las cosas que ponen techos a los líderes son cuestiones de destreza personal, como la incompetencia para manejar el miedo y el enojo. El no saber manejar las emociones es el principal problema que enfrenta la persona para convertirse en líder y desarrollar sus proyectos.

Fuente: Punto Biz