Ingresó en la Cámara de Diputados el Proyecto de Ley de Educación para la Provincia de Santa Fe.

El pasado 14 de abril el diputado Alejandro Boscarol, con el acompañamiento del Bloque de la Unión Cívica Radical, ingresó a la Cámara de Diputados para su tratamiento, el Proyecto de Ley de Educación para la provincia de Santa Fe.

Hace casi 70 años que Santa Fe no cuenta con una Ley de Educación, por lo que Boscarol precisó: “Es contradictorio con una provincia que a lo largo de su historia se ha destacado por sus aportes a la educación, a la ciencia y a la tecnología. Santa Fe es una de las pocas provincias, junto con Mendoza, que no tiene su propia Ley que defina las particularidades del sistema”.

El proyecto que se debate se fundamenta en la necesidad de fortalecer el rol educador de la escuela. Los graves problemas sociales y económicos de los últimos años, impactaron directamente en el sistema educativo, llevando a acentuar la capacidad contenedora de la escuela y relegar sus funciones pedagógicas con un impacto directo sobre la calidad.

En este sentido, el diputado precisó que la Ley propicia un enfoque integral del derecho a la educación basado en la inclusión con calidad, “porque además de sostener el carácter público, gratuito y laico, y estructurado en base a los principios de obligatoriedad y no discriminación, promueve avanzar en aspectos de la calidad educativa del sistema”.

Boscarol precisó que la ley buscará con ésto garantizar:

• condiciones adecuadas para el desarrollo de los aprendizajes, con infraestructura y equipamiento indispensables y suficientes horas y días de clases;

• contenidos significativos y de calidad, con docentes actualizados, prácticas pedagógicas innovadoras y materiales de estudio de calidad;

• espacios de participación en las instancias escolares y de gobierno de la educación.

La Ley presentada fija metas de calidad, promoviendo:

- educar desde los primeros días, universalizando la Educación Inicial con Jardines Maternales para niños y niñas desde los cuarenta y cinco (45) días, con propuestas pedagógico-educativas de alfabetización emergente y haciendo efectiva la obligatoriedad desde los 3 años. Porque los Jardines Maternales familiarizan a los chicos desde pequeños con signos, rótulos, palabras y con lecturas de cuentos que los animan en sus primeros garabatos. Y también para que las madres puedan trabajar o estudiar mientras sus hijos se educan;

- clases todos los días, con chicos aprendiendo en sus aulas, maestros que se especialicen y ganen bien a partir de salarios que se reajusten automáticamente según la inflación. Y también con incentivos que premien dedicación, compromiso, asistencia y por enseñar en escuelas de barrios pobres;

- más horas de clases, con jornada escolar extendida en la primaria para deportes, artes, idiomas e informática, priorizando los sectores más desfavorecidos, y con apoyo escolar para que no repitan. Con una secundaria que aproveche las nuevas tecnologías, sea innovadora y compatible con las nuevas culturas juveniles. Concentrando horarios docentes en una misma escuela, con tutorías de apoyo que acompañen la trayectoria escolar de los chicos;

- una escuela ordenada y que integre, porque en un aula desordenada el que pierde es el chico que tiene más dificultades de aprender. Con acuerdos democráticos de convivencia, que todos respeten y se sientan respetados. Para recuperar la autoridad del maestro con el apoyo de autoridades y padres.

La Ley establece un mayor involucramiento de los padres, porque la efectiva capacidad transformadora de la escuela depende de la participación, el diálogo y la decisión concertada de todos.

Por ello, se promueve:

- crear Consejos Escolares conformados por quienes integran la comunidad educativa de un establecimiento: directivos, docentes, no docentes, padres y alumnos.

- constituir Foros Educativos Regionales para la recepción de propuestas, demandas y sugerencias de los Consejos Escolares.

- revitalizar el Consejo Provincial de Educación como el espacio de debate para una mejor planificación, implementación y evaluación de las políticas educativas en los diferentes niveles y modalidades, a partir de la participación de autoridades ministeriales, universidades, docentes, padres y entidades gremiales (docentes y estudiantiles).

Asimismo, la Ley prevé la implementación de procesos de autoevaluación permanente y planificación educativa. La escuela tiene que ser evaluada de manera continua y periódica en la base misma del sistema, con la participación de sus propios actores.

Finalmente, la Ley destina los recursos necesarios, garantizando para el Sistema Educativo Provincial un porcentaje mínimo de recursos en cada ejercicio no inferior al treinta y cinco por ciento (35%) del Presupuesto.